El Sendero de Los Puertos de Santa Bárbara
Si te gusta el senderismo, no dejes de disfrutarlo
El sendero de Santa Bárbara consiste en un sendero circular, el cual se inicia y finaliza en el Aula de Naturaleza de Los Puertos de Santa Bárbara. La ruta comienza en dirección a los Pérez Bajos, en donde se atravesará un tramo de la rambla de los Malacates, bordeando el Alto de Las Cutandas. Seguidamente la ruta transitará el núcleo rural de Los Pérez, y bordeará el Cabezo Negro de Los Pérez hasta llegar al núcleo rural de Los Cañavates. Continuando el sendero se llegara al punto de inicio de los cordeles de Perín y Cuesta Blanca, en donde recorremos el trazado de este último hasta bordear el Molino de Santa Bárbara y poner de nuevo dirección a Los Puertos de Santa Bárbara y al Aula de Naturaleza en donde finalizará el sendero. Durante el recorrido encontraremos formaciones volcánicas, de tipo estromboliano, con erupciones en las que hace 2,6 millones de años emitieron gran cantidad de materiales piroclásticos y coladas de lava de escasa potencia. Además de observar la arquitectura tradicional del Campo de Cartagena, los vestigios de la agricultura de subsistencia tradicional de secano, y las poco conocidas pedrizas, infraestructuras que sirven para retener tierra fértil y recursos hídricos.
Esta ruta transcurre por un territorio donde el protagonista es el hábitat de Astragalus nitidiflorus, conocido popularmente como Garbancillo de Tallante, la cual habita en suelos de tipo volcánico, con materiales basálticos alcalinos y asociada a cultivos de secano. El Garbancillo de Tallante se encuentra a nivel mundial exclusivamente en el municipio de Cartagena, concretamente en las proximidades de las poblaciones de Tallante y Puertos de Santa Bárbara. Constituye uno de muchos endemismos que podemos encontrar en la Región de Murcia.
Puntos de interés
El Garbancillo de Tallante es una planta leguminosa herbácea, postrada con tallos ascendentes, cuyo tamaño oscila entre 40 y 80 cm de diámetro. Sus hojas son imparipinadas, con foliolos elípticos que están cubiertos de pequeños pelos para protegerse de las altas insolaciones y el viento. Se encuentra localizada exclusivamente en el municipio de Cartagena, concretamente en las proximidades de las poblaciones de Tallante y Puertos de Santa Bárbara. Habita exclusivamente sobre suelos volcánicos, de materiales basálticos alcalinos, y junto a cultivos tradicionales de secano, como almendros y algarrobos, con laboreo mínimo. Su floración se produce en primavera, con una duración de entre 2 y 3 meses, dando lugar a flores de color amarillo pálido, que poseen unas quillas de color amarillo verdoso. La longevidad de esta planta no suele superar los 4 o 5 años.
El Cabezo Negro de Los Pérez está conformado por basaltos alcalinos en casi su totalidad, con edades comprendidas entre los 5 millones de años y el millón de años. Este enclave volcánico presenta un gran interés petrológico y mineralógico, debido a la presencia de basaltos alcalinos; a la vez que interés geodinámico y vulcanológico, debido a la excepcional conservación de distintas coladas de la lava superpuestas, y a la presencia de disyunciones columnares y esferoidales. A pesar de la presencia de estos elementos de interés, en la actualidad no se encuentra catalogado como Lugar de Interés Geológico (LIG). También se trata de un área crítica para el Garbancillo de Tallante debido a que se trata de una de las escasas zonas en donde se encuentra poblaciones naturales de la especie.
El azufaifo es un arbusto de porte semiesférico que puede llegar a alcanzar hasta 4 metros de altura. Se encuentra en cauces arenosos o pedregosos de ramblas, márgenes de cultivos y en cultivos abandonados. Lo podemos encontrar en las laderas del Cabezo Negro de Los Pérez y del Cabezo Negro de Tallante, y en la Rambla de Los Cañavates, entre otros lugares de la zona Oeste del campo de Cartagena. Algunos individuos de azufaifo pueden llegar a alcanzar áreas de copa de entre 12 y 15 m2 y alturas superiores a los 2 metros. Esta especie es de gran interés, y por ello las comunidades que forma, por su singularidad en el Continente Europeo, son consideradas prioritarias para la Directiva Hábitat. En situaciones de extrema sequía, sólo sobreviven en el paisaje del Campo de Cartagena los azufaifos, algarrobos y el Garbancillo de Tallante.
El algarrobo , conocido popularmente como garrofero, suele alcanzar los 5 a 6 metros de altura. Es una especie originaria de la región mediterránea caracterizada por su gran resistencia a la sequía. En el Campo de Cartagena encontramos algunos ejemplares de algarrobos que se encuentran recogidos en el “Catálogo de Árboles Monumentales Prioritarios”, como el Garrofero de Galifa (5,70 m de perímetro y 13,10 m de altura. Los frutos del algarrobo son las algarrobas o garrofas. Se trata de una vaina de color castaño oscuro, comestibles y que se emplean en el forraje. Las propiedades nutricionales y saludables de la garrofa, sus características antioxidantes, sus vitaminas, la ausencia de gluten, su contenido en azúcares de absorción lenta y su contenido en fibras solubles, la han convertido en un producto de gran interés en la cocina, destacando la harina de algarroba en repostería y el garrofín como espesante natural extraído de la semilla de la garrofa.
Las norias de sangre deben su nombre a que la fuerza motriz era llevada a cabo por bestias de tiro, como mulos y burros. Las norias nacieron en Oriente, datadas por primera vez de manos de Arquímedes en el siglo III AC. Posteriormente los romanos mejoraron el funcionamiento de las mismas y finalmente fueron los musulmanes quienes importaron la noria a España, dando esplendor a la actividad agrícola de Al-Ándalus. La Noria de Los Marines tiene su origen en los años 60 del siglo XX. Inicialmente construida en madera, tras una rotura se reconstruyó con hierro. Se ha empleado durante décadas para la extracción de agua que se usaba en el riego de los cultivos tradicionales de secano de la zona. Se trata de un importante elemento vivo del patrimonio y la cultura del agua en el paisaje del Campo de Cartagena.
El molino de Santa Bárbara era utilizado para la molienda de cereales y para producir harina, para la realización del pan y actualmente se encuentra en mal estado debido a que solo queda en pie la torre, la cual ha perdido su encalado, quedando la piedra a la vista. Los molinos de viento abundan por todo el paisaje de la comarca, desde Cartagena hasta el inicio de la Sierra de Carrascoy. Su característica principal, y lo que los diferencia de otros molinos de viento en España, es la utilización de la vela latina en vez de aspas rectangulares. La mayor parte de estos molinos fueron construidos entre los siglos XVIII y XIX y actualmente la mayoría de estas edificaciones se encuentran en estado de ruina debido al desuso, a pesar estar protegidos como Bienes de Interés Cultural (BIC).
La Ermita de Los Puertos de Santa Bárbara se estima que se construyó hacia el año 1745 y se trata de un edificio de nave única con cubierta a dos aguas que mantiene las estructuras de la etapa barroca. Estéticamente de la fachada principal, de formas muy sencillas, podemos destacar el porche que se encuentra cubierto de vigas de madera y tejadillo, existiendo también unos poyetes adosados a los muros para que descansen los feligreses que acudan. En la parte superior del porche, en la espadaña, existen unos azulejos que presentan la imagen de Santa Bárbara.







